Cinco
años han pasado desde “Ænigma” y probablemente significa que la oportunidad
para In Vain y la fenomenal salida de su tercer álbum se convierta en algo más
que curiosos destellos en el Metal Progresivo. Si la banda hubiera regresado
con toda su fuerza después de los discos más sobresalientes, ellos podrían
haber sido capaces de consolidar su estatus de culto. Desafortunadamente,
aunque “Currents” ciertamente contiene su justa parte de momentos
gratificantes, simplemente no es una versión lo suficientemente fuerte como
para que los prometedores noruegos consoliden su legado.
“Currents”
es una versión más simplificada y experimental que In Vain haya puesto en el
pasado. Aunque los álbumes Aenigma y The Latter Rain (de 2007) son
innegablemente expansivos, ambos discos son fáciles de encasillar en varias
categorías de Metal Melódico y más tradicionalmente hacia el Progresivo
respectivamente. Sin embargo, mientras que “Currents” cubre definitivamente una
gran parte del territorio durante sus cuarenta y dos minutos de tiempo de
funcionamiento engañosamente corto, nunca capitaliza realmente en ninguna de
las muchas direcciones diferentes que sondea, y la salida entera se presenta
como menos coherente y compuesta como resultado.
Abriendo con
"Seekers Of The Truth" encontramos un Death Metal intentando recordarnos al mítico
sonido de Gothenburg (sin ser tan impresionante como suena) mientras que
continuamente son interrumpidos por pasajes melódicos más grandiosos que
simplemente no encajan bien con su entorno. Del mismo modo,” Soul
Adventurer" se basa en un riff repetitivo y rítmico que me recuerda a Tool,
que alterna entre secciones de esta melancólica epopeya Folk-Metal sin que los
dos elementos parezcan conectarse adecuadamente. El tema también incluye un
spot vocal de Matt Heafy de Trivium, que debería ser suficiente para elevar la
canción a los niveles superiores del álbum por sí solo. Sin embargo, mientras
que Heafy sorprendió a muchos (menos a mí) al ofrecer una de las actuaciones
vocales más impresionantes y versátiles del año pasado, aquí emplea un registro
falso-profundo, y profundo que se remonta a los momentos más débiles del Silent
In The Snow (2015) y, en última instancia, termina siendo tan artificial como
inapropiado.
El riff principal en sí mismo es lo suficientemente atractivo para
los oídos por sí mismo, y su hipnosis rítmica por sí sola probablemente verá la
canción convertirse en un elemento básico de las bandas en vivo. Sin embargo,
la pista en sí misma se siente menos como un todo y más como un choque entre
dos composiciones muy distintas e incompatibles, con lo mejor de las dos sólo
ganando ligeramente en esta ocasión.
Se
puede decir lo mismo de la mayoría de los otros temas del álbum. "Blood We
Shed", por ejemplo, comienza a sonar como si fuera el primer disco de
Killswitch Engage, antes de dar un giro para ver más territorios con más Morbid
Angel y Atheist inclinados antes de entrar en algo que suena como una cruz
entre una balada moderna de Dream Theater y un himno de "Battle Metal",
cuya sección se arrastra demasiado tiempo antes de regresar a su escenario
extremo de la misma manera abrupta; y aunque la acumulación de todas estas
influencias generalizadas suena intrigante, In Vain nunca consigue que ninguna
de ellas se establezca de manera convincente.
Sorprendentemente, su disco
anterior es mucho más consistente. “Origin” es fácilmente el tema más elaborado
del álbum y, por primera vez, se siente como una buena continuación de Ænigma;
mientras que "As The Black Horde Storms" ofrece una versión más
realizada del enfoque más épico y cálido del Folk Metal que la banda ha buscado
claramente en este disco. Sin embargo, en última instancia, su efecto se
dilapida por su tardía colocación en el registro, y sólo representan dos breves
momentos de inspiración en medio de un mar de composiciones desarticuladas y conceptos
dilapidados.
El
hecho de que el álbum esté siendo editado como una edición estándar y
"especial", sólo física, con una lista de temas ampliada y un orden
drásticamente diferente habla de la indecisión detrás de la composición de “Currents”.
A pesar de que en el camino hay algunos aspectos destacados, el álbum es en
última instancia demasiado inconsistente y poco convincente en general para
presentarse como un paquete completo. La sensación de que se encuentra más bien
como una banda que tira diferentes sonidos enfocados al Metal Progresivo, es
notoria la ausencia de cinco años de la banda y el precedente establecido antes
de su salida, y mientras que el álbum no es de ninguna manera un completo fracaso,
es apenas suficiente para mantener el estatus de In Vain para cinco años más
por venir.
Tengo la esperanza, para que “Currents” no resulte ser una
carga condenada al fracaso.
Los
Tracks:
Seekers Of The Truth
Soul Adventurer
Blood
We Sheed
And
Quiet Flows The Scheldt
Origin
En
Forgangen Tid (Times of Yore Pt. II)
Ghost
Path
As the
Black Horde Storms
Standing
on the Grounds of Mammoths
1 comentario:
Impresionante resumen muy claro,gracias por compartir bro.
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